El adolescente es un período especial de vida porque nuestros adolescentes sienten varios cambios. No sólo sobre sus cuerpos, sino también sobre sus reflexiones, su vida social. Ellos construyen, se convierten en ultes ad (o) a los ojos de otros. ¡Este es un momento clave de su existencia!

La presencia de los padres es de gran importancia, en la construcción de su identidad aportando estabilidad y estimulando la autoreportación.

Debe tenerse en cuenta que es sólo un pasaje y que incluso si, por emancipar, nuestros ADOS se alejan de nuestros padres, esperan una presencia y apoyo de usted.

La paradoja entre la necesidad de apego y el deseo de desapego hace que muchos padres no saben cómo tomarlo.

Los ADOS necesitan su apoyo, su confianza y su amor, mientras permanecen discretos, y aceptan que el ad(o)ulte se convierte gradualmente y cada vez más, evitando al mismo tiempo el corte de enlaces.